El financiamiento a través de la Bolsa de Valores proporciona numerosos beneficios como tasas de interés competitivas en relación a otros métodos tradicionales, estructuración de emisiones según las necesidades de financiamiento y la naturaleza de los flujos, así mismo la empresa emisora se posiciona ante el público como una empresa de gran solidez, solvencia, transparencia y prestigio, lo que le proporciona una gran ventaja competitiva.